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Entrevista  Las tres claves de la cultura de seguridad son participación, sistemática en la definición de un modelo formal, y liderazgo Además, desde el punto de vista nacional y del Consejo de Seguri- dad Nuclear, estamos canalizando los esfuerzos y el apoyo a través de las plataformas internacionales existen- tes, básicamente el OIEA, que conoz- co muy bien y que es el canalizador adecuado de esa asistencia. Ahora mismo, por ejemplo, estamos anali- zando una petición de Ucrania que se formuló a través del OIEA para asis- tencia en equipamiento que ha sido destruido, porque necesitan reponer monitores, detectores. Estamos tra- bajando para formular una donación por parte del Consejo. LA CULTURA DE SEGURIDAD ¿Qué estrategias considera que deben fomentarse en las organiza- ciones para reforzar la cultura de seguridad? La cultura de seguridad es clave en nuestro trabajo. Si analizamos los sec- tores en los que el Consejo tiene competencias, podemos decir que en el nuclear está muy desarrollada, mientras que la cultura de seguridad radiológica, si le ponemos el apellido, necesita incrementarse. Y para ello hay que seguir trabajan- do en inculcar la necesidad de dar prioridad a la seguridad, y fomentar un ambiente en el cual prevalece la identificación de problemas, su reporte y la búsqueda de soluciones. Y eso se logra con sistemática, con participación de los empleados, de los operadores, de los operarios en general, y con liderazgo. Esas tres claves aplican a todas las instalaciones radiactivas, incluidos por supuesto los hospitales, que pue- den encontrar sinergias valiosas para desarrollar sistemas de cultura de seguridad también en sus instalacio- nes, aplicando soluciones sofisticadas pero también pragmáticas. Y estoy convencido de que el futuro tiene que ir por ahí. La supervisión por parte del Consejo está muy bien, pero está muchísimo mejor que haya una concienciación clara de la orga- nización sobre la importancia de la Consejo? ¿Pueden hacer cambiar, por ejemplo, las previsiones de cierre de las centrales nucleares definidas en el PNIEC? En cuanto al segundo punto, es fácil de responder, porque el Consejo no tiene ninguna responsabilidad en la planificación energética. Seguramen- te todos los implicados estarán anali- zando la situación, no solo en cuanto a la energía nuclear sino de todo tipo de energías, y no solo en España sino en toda Europa. No cabe duda de que esta situación es una lección de la que tenemos que aprender para planificar mejor el futuro. Pero, insis- to, esto no le corresponde al Consejo. Y sobre el ataque a Ucrania, más allá del aspecto político, para un regula- dor nuclear como el Consejo estos ataques, con posibilidad de afectar a instalaciones nucleares o radiactivas, son claramente inaceptables en la línea de lo expresado por el Direc- tor General del OIEA. La normativa nacional e internacional en seguridad nuclear y protección radiológica está prevista para ser aplicada en condi- ciones de normalidad, no en guerra. Si el operador de la instalación es intervenido por una potencia exterior, ¿qué responsabilidad tiene el regula- dor? Es una situación inaceptable, y no solo por el riesgo físico de las ins- talaciones, sino también por el riesgo al que están sometidos los operado- res y los empleados de estas instala- ciones, riesgo físico pero también una presión psicológica tremenda. Lo que hemos hecho desde el Conse- jo es ayudar a Ucrania y a su regulador apoyando las infraestructuras interna- cionales de las que formamos parte, fundamentalmente en Europa, a través del Grupo de Reguladores Europeos, al cual tradicionalmente estaban invi- tados a participar Rusia y Ucrania, y del que se ha apartado a Rusia. 8 RADIOPROTECCIÓN • No 98 • Julio 2020 


































































































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