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Colaboraciones pital público Konstantopoulos, se elaboró una cuidadosa estrategia para avanzar realmente en la implementación del proceso de optimización. Sigue pendiente el asunto de cómo evaluar la participación de los individuos (por ejemplo, los profesionales habilitados) en la implantación de ALARA y cómo garantizar la continuidad de dicha par- ticipación. La reducción de la dosis en el campo médico se consigue principalmente mediante instrumentación novedosa que incluye avances de software: los represen- tantes italianos presentaron un algoritmo para optimizar la imagen en angiografía aórtica por TC ajustando el ruido y la señal en la exposición. Se señaló que la emulación entre fabricantes impulsa el diseño de dispositivos que contribu- yen a la reducción de la exposición. En situaciones de exposición existente, las considera- ciones éticas y sociales son las que están más en juego debido a que, por lo general, las partes interesadas locales (es decir, miembros del público, profesionales, autorida- des sanitarias, etc.) desconocen lo esencial acerca de la radiactividad y la protección radiológica, a pesar de que son ellos los principales agentes e, incluso, los que van a tomar las decisiones durante el proceso de optimización. En tales situaciones, el proceso de optimización se realiza caso por caso, según las circunstancias. El primer caso práctico del taller trató sobre el plan de acción frente al radio para la gestión del legado radiológico de la industria relojera suiza. Se encontraron trazas de radio en viviendas de antiguos empleados que trabajaban en casa. Con la autoridad reguladora asumiendo exitosamente el mando, la elección del nivel de referencia fue un punto clave para determinar la magnitud de la descontaminación. También fue crucial la formación de los trabajadores que realizaron las tareas de descontaminación. El segundo caso práctico estaba relacionado con las dificultades de la República Checa para lograr una mejor concordancia entre el plan de acción nacional frente al radón y la política de ahorro energético, con el fin de mejorar la calidad del aire en el interior de las viviendas y edificios de interés público. En el tercer caso práctico, la autoridad belga de PR presentó su propuesta para establecer un criterio razonable para la gestión del agua potable, lograr un mejor compromiso entre protección del consumidor y coste, y garantizar la confianza de la sociedad en el control del agua. Se podrían identificar, para los distintos casos, cuatro cuestiones clave que moldearon el diálogo entre los expertos en PR y las partes interesadas locales: – los valores numéricos (de exposición) y su significado; – la importancia de los factores económicos; – la asunción tanto de la responsabilidad como del lideraz- go en el proceso; – la relación de las iniciativas de protección radiológica con la calidad de vida global, teniendo en cuenta consi- deraciones sociales y éticas. También se presentó un caso práctico específico, rela- cionado con radiación no ionizante (RNI), que muestra las dificultades para implementar el principio de optimización en un contexto de diversidad de fuentes de RNI, incerti- dumbre acerca de sus efectos, la alta sensibilidad de algu- nas personas a las RNI y la controversia sobre los focos de casos de leucemia. DISCUSIÓN Sobre la razonabilidad Se formaron tres grupos de trabajo (GT) para investigar más a fondo el tema de implantar el proceso de optimiza- ción con la implicación de las partes interesadas. Al final del debate, los tres grupos estaban de acuerdo con las conclusiones del primer taller (Schneider et al., 2017). Se resaltaron los siguientes puntos adicionales. En el sector nuclear El grupo de trabajo encargado del sector nuclear abogó por un enfoque holístico para optimizar todos los riesgos en conjunto, y no solo la dosis, en un proceso de mejora continua. Tal enfoque debería encontrar un equilibrio entre los distintos riesgos, con el apoyo de equipos multidiscipli- nares (expertos en riesgos convencionales, ambientales y radiológicos). De hecho, centrarse en el riesgo radiológico puede dar lugar, en ocasiones, a desequilibrios en la pro- tección al dar demasiado peso al riesgo de la radiación en comparación con otros peligros. Se necesitan pautas ade- cuadas para evaluar y gestionar el riesgo en un contexto de riesgos múltiples. Desde el punto de vista de la protección de los tra- bajadores, se considera que la implantación efectiva de buenas prácticas, consensuadas a nivel internacional, es una prueba de la aplicación del principio ALARA. El aná- lisis coste-beneficio y el uso de herramientas de ayuda a la decisión multicriterio pueden ayudar a presentar un argumento razonado en situaciones donde una reducción adicional de la exposición ya no resulte ser ALARA, espe- cialmente a dosis bajas. La aplicación del principio ALARA también incluye la necesidad de crear grupos de expertos, procedimientos y reuniones, así como el desarrollo de una cultura de PR a todos los niveles. Deben participar todas las categorías del personal: la jerarquía de la orga- nización, los trabajadores internos y externos, y, también, las autoridades. Incluso el regulador necesita educación y entrenamiento. Resulta útil compartir la experiencia tanto del explotador como de los subcontratistas. El hecho de compartir responsabilidades entre el explotador y los subcontratistas no es algo obvio y debe establecerse una cooperación franca. Es esencial que exista un compromiso por parte del explotador. El concepto de "cliente inteli- gente" introducido por el OIEA (OIEA, 2011) puede ayu- dar: el explotador tiene la responsabilidad de incorporar la cultura de PR en toda la cadena de la subcontratación. El principio ALARA también debería implantarse utilizando un enfoque gradual, acorde con el nivel de riesgo. 28 Jean-François Lecomte et al - RADIOPROTECCIÓN • No 97 • Marzo 2020